Conoce las propiedad principales para asegurar tu correo electrónico.
Es importante configurar correctamente las propiedades SPF, DKIM y DMARC porque ayudan a proteger tu dominio de correo electrónico contra el uso indebido, el spam y el phishing.
Al asegurarte de que tus correos electrónicos sean auténticos y no sean manipulados, evitas que otros utilicen tu dominio para enviar mensajes fraudulentos o maliciosos a tus contactos. Esto no solo protege tu reputación como emisor, sino que también mejora la confianza y la seguridad de tus destinatarios al recibir correos electrónicos de tu dominio.
Configurar estas propiedades correctamente es una parte fundamental de mantener segura la comunicación por correo electrónico.
SPF (Sender Policy Framework)
SPF es una herramienta que ayuda a proteger tu dominio de correo electrónico contra el spam y el phishing. Lo hace permitiendo que tú como propietario de un dominio (por ejemplo, tudominio.com) especifiques cuáles servidores de correo están autorizados para enviar correos desde tu dominio.
Por ejemplo, si solo usas un proveedor de correo específico (como Gmail o Outlook) para enviar correos electrónicos, puedes decirle a SPF que solo esos servidores están permitidos para enviar correos desde tudominio.com. Esto ayuda a los servidores de correo que reciben tus correos a verificar si los correos que dicen venir de tu dominio son legítimos o no.
DKIM (DomainKeys Identified Internet Mail)
DKIM es otro protocolo que ayuda a garantizar que los correos electrónicos que se envían desde tu dominio no han sido modificados o alterados en el camino. Lo hace firmando digitalmente los correos con una clave privada que solo tú tienes.
Cuando los correos llegan a su destino, el servidor de correo del receptor puede usar una clave pública, que tú publicas en tu DNS, para verificar la firma digital del correo. Si la firma coincide, significa que el correo es auténtico y no ha sido alterado.
DMARC (Domain-based Message Authentication, Reporting and Conformance)
DMARC es un protocolo que combina SPF y DKIM para proporcionar un nivel adicional de protección contra el spam y el phishing. Permite a los propietarios de dominios especificar cómo deben manejarse los correos electrónicos que no superan las verificaciones de SPF o DKIM.
Con DMARC, puedes elegir qué hacer con los correos que no pasan las verificaciones: puedes decidir si deben ser rechazados, marcados como spam o entregados normalmente. Además, DMARC te permite recibir informes sobre cómo se manejan tus correos electrónicos para que puedas ajustar tus políticas de seguridad.
En resumen, estos tres protocolos trabajan juntos para ayudar a proteger tu dominio y a garantizar que tus correos electrónicos sean seguros, legítimos y confiables. Si tienes un dominio propio, es muy recomendable configurarlos para proteger tus comunicaciones por correo electrónico.